Helado de fresón sin azúcar, sin lactosa, gluten free

Bueno, este helado de fresón es tan, tan, tan sencillo de hacer que dudé sobre si compartirlo por aquí o no pero a la vez, es tan sano, está tan, tan, tan rico y es tan especial que, ¿cómo no hacerlo? ❤

Hacía un montón de tiempo que no lo hacía. Claro, los fresones están buenos de primavera en primavera… y el otro día en Masterchef, Pepe lo preparó y yo justo tenía una caja de fresones en la nevera que han sido protegonistas de muchas de nuestras meriendas estos días.

Me apetece inventarme algún postre algo especial que incluya como toque final este helado maravilloso… Perlas de yogur griego con nueces caramelizadas y helado de fresón, espuma de merengue con crujiente de almendras y helado de fresón… Ya os contaré en qué acaba todo esto, por el momento, os enseño cómo se hace el helado más fácil y rico del mundo. Contadme si lo habéis probado alguna vez y si os animáis a hacerlo.

Ingredientes: 

• Fresones. También puedes hacerlo con fresas, añadir frutos rojos como frambuesas y arándanos…
• Yogur natural. Podéis hacerlo con yogur de coco, un chorrito de leche de almendras o directamente prescindir de él si queréis conseguir una opción sin lactosa.

Paso a paso: 

Lava los fresones, quítales las hojitas y pártelos a trozos. Mételos en una bolsita de plástico y congélalos.

Después, ponlos en una batidora potente junto a una cucharada de yogur y bate hasta que quede cremoso. Seguramente, primero quede un granulado duro tipo granizada pero si cotinúas batiendo, adquirirá una textura más cremosa.

Si haces más cantidad, puedes guardarlo en el congelador. Un truco para que no se cristalice es ir moviendo el helado cada media hora aproximadamente para que mantenga su estado tan cremoso.

¡Queda espectacular! Aunque en la mayoría de recetas encontraréis azúcar o algún edulcorante entre sus ingredientes, ¡no lo necesita! Y mucho menos ahora que las fresas y fresones están tan sabrosos y dulces.

¡Probadlo, probadlo, probadlo!

¡Feliz miércoles!

♥